En mi huerto decía un cerezo.. cuando me haya ido
-quizás un triste día me vaya-
de esta estampa serrana mía
que fabriquen una guitarra.
Cuando ya no de fruto y el hortelano me de muerte
que no vayan murmurando al verme
a mi que no me molesten.
Por mucho que hable la gente
yo no sé lo que a mi me espera
cuando me sorprenda la muerte.
A mi lado vivía un castaño
que en su talle tanto se parecía a mi
y por ser tan buen mozo lo cortaron hace un año.
Por ser bonita madera hicieron de el un santo
y cuando en el altar le rezaba el hortelano
le decía: en mi huerta te criaste de tus frutos no comí
los milagros que tú hagas que me los cuenten a mi.
El hortelano en su desconsuelo decía:
yo me estoy volviendo loco.. las cuentas a mi no me salen
por eso le pido al cielo que venga Dios y me ampare..
entre guitarras y santos esta la huerta ¡vacía!!.
Mis cuentas no están cabales
me faltan las mandarinas
y me sobran naranjales.
Me pasó una cosas muy rara
anoche dormí contigo
estando sólito en mi cama....!!!
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