Estas manos mías que tanto saben de tu cuerpo
que tantas veces dibujan amapolas
en los trigales y en tus barbechos
que hacen mapas tatuados a oscuras sobre tu pecho
por cada esquina van dejando banderas
de sus batallas ganadas;
a decir verdad sin mucho esfuerzo..
para decirte con certeza
que la palabra nace trémula;
cuando tu deshaces el juramento de la tortuga
y ya no te crees que tu caparazón
es inexpugnable...!
Porque la carne es débil y el alfarero es quien manda..
desde aquel dichoso día en que Eva decidió
dejar para mejores momentos la obediencia siega
y probar el bocado exquisito y prohibido de la manzana...!!
A pesar de la lluvia de la noche;
confiesas con tu voz trémula ,
que a pesar de los pesares..
que tu cuerpo es absolutamente tuyo
y se lo entregas al mejor y más experto alfarero
que un día paso por tu calle..
y para que tú palabra se haga verbo
nos fundimos los dos en el mismo barro...!!
Siempre escribes como un sueño, mi querido y gran admirado poeta, es un honor visitar tu espacio!
ResponderEliminarte admiro y te respeto mucho!
Gracias amiga Eileen por tu visita, me siento muy alagado con tu comentario. Yo sólo tengo una duda y que no se si un día podre publicar mis poemas. Besos amiga.
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