En un rincón de mi alma te hice el nido..
aquel veinticinco de Marzo
el primero que junto a tu cuerpo he vivido..
en tierras bendecidas se siembran los amores
que con ímpetu florecen...
Los que ya hacía bastante tiempo comenzaron
a fabricar un nido en lo más puro del corazón..
de aires perversos y viciados protegido
y al calor que da el amor sometido...
Y te dije: he aquí para la eternidad..
sin modificar un ápice de lo que aquí y hoy te digo..
tu serás mi alondra y yo tu alondro!
y este hasta la noche de los tiempos será nuestro nido...
Pertenezco a una raza de hombres
que mi palabra es el evangelio de lo que prometo y digo..
en mi corazón no hace la mentira su nido..
¿Lo entiendes mujer, lo comprendes?.
¡Oh poder de de la adorada mujer alzando mutaciones
de frágil y bello rostro!
¡Oh diosa del amor eterno,
celadora del amor sincero!!
Cuida y protege para siempre este amor nuestro!!.
Gracias corazón por ser tan especial como eres, te amoooooooooooooo
ResponderEliminarRafa, como siempre muy sentido y bello poema para tu alondra amada, como ella no responde pues yo estoy aquí de saporiti y de chismosa... ¡jajajaja!, ya lo había leído en la página Coespo, qué bien que lo has guardado, y así será, tu amor es bendecido siempre porque donde no hay engaño y riego permanente, el huerto tal vez siempre esté lleno de flores. Abrazos.
EliminarRaquel gracias por tus comentarios a los poemas que me escribe mi esposo, lo que pasa es que yo los comentarios se los hago de otra manera.
ResponderEliminarMagalis.