A lo lejos brilla el pantano con sus sosegadas aguas
que le hacen brillar al sol sus lentejuelas de oro,
atraviesan los pinsapos sus tupidas sombras,
bella dehesa donde pasta el bravo toro.
De la hermosa sierra en sus cumbres
erige su belleza el pinsapo y el quejigo altivo,
y en la llanura enciende la lumbre
las aceituneras debajo del olivo.
Se oyen piafar los rebeldes caballos
que galopan por la espesa arboleda,
levantan fuego de las piedras sus acerados callos,
en las resecas veredas gran polvareda.
Allá por la montañas rocosas
sombreadas por los espesos alcornocales,
enjambres de abejas y mariposas
sobre vuelan encinas y jarales.
Alumbran por la noche centenares de luciérnagas
y cantan a compás parvadas de grillos halados,
en la rivera de estas cálidas arenas
que las cobijan con su manto estas serenas nieblas.
Bordeando el pantano galopa un corcel fogoso
llevando una moza sobre sus ancas,
un gitano flamenco y muy rumboso
hacia las cumbres borrascosas de las montañas blancas.
Bajo las sombras de los verdes olivares
miran con asombro muchachas y mozalbetes,
se vuelan bandadas de garcetas de los vecinos cañaverales,
mientras se divisan en Zahara banderas y gallardetes...!!
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