Dormida sobre mi pecho...

De noche cuando te veo dormida sobre mi pecho
y tu piel desnuda sobre mi cuerpo,
es tan grande la sensación de placer que siento...
que pienso; si esto no es el paraíso será la entrada del cielo...
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Siento tantos deseos de acariciarte,
que le pido a la luna que derrame sus bellos
rayos de luz sobre tu almohada y que iluminen
tu carita de porcelana, para poder darte un beso...
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Trato de decirte en silencio, tu nombre sin palabras...
Y dulces suspiros de amor que desgarran mi garganta,
van llenando tu corazón y acariciando tu alma...
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Pienso que como soy un poeta loco y romántico,
puedo susurrarle al viento, dulces canciones de amor
y que te las canten los pajaros...
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En mi locura yo pienso y no encuentro
ninguna palabra que exprese lo que por ti siento,
que son mis manos las que te hablan,
poniendo el corazón en cada dedo...!!